En pleno corazón de nuestro barrio alto, hay dos calles que en su día fueron referente de ciertas actividades sociales y comerciales que las encumbraron como referente de las noches golfas de la ciudad. Esos tiempos quedaron muy atrás y hoy languidecen como pocas en el barrio. Y no solo por la desaparición de sus actividades, sino por la desidia de muchos años de mirar a otro lado por parte de los que nos regían.
Hoy su abandono es absoluto, y hace poco estuvieron tapiadas y cortadas con total indiferencia. La calle Norte sigue después de 8 años cortada sin fecha de recuperar el tránsito y la calle Encarnación parece Mostar en los años 90. Simplemente desidia y abandono.
Por cierto, según el cronista oficial de la ciudad, Alberto González Rodríguez, la calle "El Burrro" no era Encarnación sino la calle Norte.
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